jueves, 30 de enero de 2014

La declinación magnética

La declinación magnética


El 3 de Octubre, la hierba siempre abundante, es en parte vieja, en parte fresquísima. El 5 de Octubre  "ninguna hierba”. Es el último señalamiento al respecto. Hasta ahora no ha habido ningún drama.



A diferencia del mar de los Sargazos, el de la declinación magnética occidental, resultaba algo nuevo para Cristóbal Colón.

La declinación magnética en un punto de la tierra es el ángulo comprendido entre el norte magnético local y el  norte verdadero  (o norte geográfico). En otras palabras, es la diferencia entre el norte geográfico y el indicado por una  brújula  (el denominado también norte magnético).


 Se suele considerar que la primera referencia escrita a la declinación magnética se encuentra en el diario del primer viaje  de Cristóbal Colón, si bien el manuscrito que se conserva data de mediados del siglo XVI.


 Aparte de descubrir América, Colón en sus viajes hizo varios descubrimientos importantes que no suelen conocerse. (Vientos, corrientes, mareas, calmas ecuatoriales, etc.). Pero uno de los más importantes, es el descubrimiento de la variación de la declinación magnética y el del movimiento de la estrella Polar sobre el eje del polo Norte verdadero.


El 13 de septiembre, cuando Colón aprecia la 1ª anomalía, las carabelas estaban a punto de cruzar la línea agónica o meridiano magnético cero, en que la aguja señala exactamente el Norte. A partir de aquí, se iniciaba la tendencia a la declinación Oeste. El 17, fecha de la segunda observación, la declinación era de 2º W, el 18 de 3º5, el 22 de 6º, el 26 de 7º y el 30 de septiembre, de 8º W. A partir de aquí el valor de la declinación disminuía, hasta llegar a una nueva línea agónica en las Antillas.


El 13 de Septiembre, Cristóbal Colón se percata, al caer la noche, de que se había desviado al oeste de la estrella Polar, y en la mañana se desviaba al este de la Estrella Polar. Anota en el diario: En este día, al comienzo de la noche, las agujas noroesteavan y a la mañana nordesteavan algún tanto.

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